Cuando me dispuse a encuadrar la escena, tenía la idea ya muy clara en la cabeza. Intenté volver a jugar con la pose de ella pero si sostenía el arma como en el estudio de la derecha perdería una magnífica ocasión para mostrar sus pechos. Así que no necesité más pruebas, seguí con la pose original y en el tercer boceto me limité a jugar con el humo para emplearlo como marco. Pero fue un mero trámite, porque la esencia ya estaba ahí.
El estilo que nos habían propuesto, algo cercano al Art Noveau, con una línea exterior muy marcada, era perfecto para un cartel de cine de estilo retro o una portada de cómic de los 50, así que decidí dejar una zona en la parte superior para el título.
El trabajo a línea me estimulaba porque desde hacía tiempo quería intentar aproximarme al estilo de Adam Hughes, que frecuentemente emplea una línea exterior fuerte y luego aplica color con un sombreado muy realista con Photoshop. Por ejemplo, en esta portada de Lara Croft extraída de su web oficial.
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